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viernes, 11 de junio de 2010

Holandés Joran van der Sloot mató a Stephany Flores para robarle S/. 28 mil que había ganado en el casino Atlantic City, revela la Policía


El holandés Joran van der Sloot (23) decidió robar todo su dinero a Stephany Flores Ramírez (21), a quien luego mató a golpes, desde el día en que la vio ganar más de 28 mil soles en una partida de póker.

A esta conclusión llegaron los detectives de la Dirección de Investigación Criminal (DIRINCRI), luego de culminar las investigaciones del homicidio de la hija del corredor de autos y empresario Ricardo Flores.

Los agentes averiguaron que la víctima jugaba póker en diversos casinos de Miraflores. Y el 24 de mayo, seis días antes de su muerte, ganó 28 mil 400 soles en el casino Atlantic City.

Según informó el diario 'Trome', la madrugada del 30 de mayo, cuando fue asesinada en el hotel TAC, también había ganado. Dos días antes su padre le había dado mil dólares.

Por eso, los detectives suponen que Joran, quien asistió al casino Atlantic City desde el 14 de mayo, seleccionó a Stephany Flores para robarle todo su dinero.

Para los investigadores, el asesino confeso llevó con engaños a la joven al hotel donde se hospedaba. A las 5:10 de la mañana del domingo 30 de mayo, ambos se retiraron del casino y se fueron en la camioneta de la joven, de placa A1b-533.

El extranjero dice que atacó a la joven porque la vio revisando su laptop, pero los agentes afirman que la golpeó presumiblemente para despojarla de su dinero, pero ante la reacción de Stephany, que se defendió, la golpeó en la cabeza y le hizo perder el conocimiento.

En el suelo la agarró a puñetazos y golpeó la cabeza contra la pared, para luego apretarle el cuello. Al percatarse que aún respiraba, la asfixió con su propia camisa.

Consumado su crimen y con total sangre fría, intentó borrar la evidencias y se cambió de ropa. Incluso, pensó en desaparecer el cuerpo. A las 8:45 de la mañana fugó del hotel llevándose dinero en efectivo, las tarjetas bancarias y la camioneta de la occisa.

Su plan era abordar un avión y por eso se dirigió al aeropuerto Jorge Chávez, pero como vio policías se arrepintió y tomó un taxi que lo llevó hasta Ica.

Al taxista le pagó el servicio con mil 500 nuevos soles, le regaló un reloj Ferrari, una cámara fotográfica, celular, perfumes y prendas de vestir.

En el atestado policial se acusa al holandés por el presunto delito contra el patrimonio y robo agravado subsecuente de muerte. Fue puesto a disposición de la Fiscalía.

PERU.COM

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